sábado, 6 de abril de 2013

En la vida suceden muchas cosas de las cuales debemos apreder, ver el lado negativo como positivo a la vez; los pro y los contra de todo nos ayudan a aprender y a crecer aún más como personas. Sobre todas las cosas, no cegarnos por la rabia ni el rencor e intentar pedir a Dios (o en quien tengan su fe o creencia) por aquellas personas que creemos que nos causan daño, porque también nosotros dañamos sin darnos cuenta. Que el tiempo cure las heridas, las penas o las rabias y que nos enseñe siempre a seguir tratando de hacer el bien aunque la mochila pese y nos quieran sacar de nuestras casillas. Hay muchos cambios y cosas que vendrán después y ante todo, unión y calma.

Alita.